Antes de que llegaran los tiempos de Covid-19, la higiene de manos ya era un factor clave de salud y seguridad en el trabajo como medida de prevención. La razón es muy sencilla, sea el tipo de trabajo que realizamos, las manos son nuestra principal herramienta y, al mismo tiempo, uno de los principales focos de transmisión de enfermedades.
Es probable que antes de la llegada de la actual emergencia sanitaria todos menospreciáramos la importancia de la higiene de manos, tanto mediante el lavado con agua y jabón como con geles hidroalcohólicos desinfectantes. Sin embargo, durante 2020 la campaña de salud ha reforzado el lema “Salva vidas, límpiate las manos” con la idea de reforzar un gesto que ya hacemos mecánicamente y sin pensar.
La higiene de manos en el trabajo
A lo largo de la jornada estamos expuestos a muchos gérmenes, virus, microorganismos y sustancias nocivas sin ser conscientes. Con una buena higiene de manos podemos evitar la propagación de infecciones que tan rápidamente pueden darse entre los trabajadores y generar un problema de bajas, cuarentenas, etc.
En el lugar de trabajo, donde convivimos gran parte de nuestro tiempo con otras personas, es fundamental el lavado adecuado y frecuente de manos para evitar la transmisión de gérmenes. Así lograremos crear un entorno de trabajo sano y productivo.
De hecho, tanto se ha mecanizado el lavado de manos que a menudo olvidamos la importancia de incidir en la friega de puntos clave, como las muñecas, bajo las uñas, los pulgares el dorso de la mano y de los dedos o las zonas interdigitales.
¿Y después? La forma más efectiva de garantizar una completa higiene de manos tras su lavado es mediante el gel hidroalcohólico.
Muchos estudios científicos han demostrado que una limpieza de manos superficial o ineficiente puede convertirse en foco de contaminación para la propia persona, sus compañeros, clientes, familiares, pacientes, etc.
Pese a contener agentes agresivos para la piel, con el gel hidroalcohólico facilitamos la eliminación de todo rastro de bacterias, microorganismos y virus que puedan quedar. Lo que tendremos que hacer para contrarrestar su efecto en la piel es incrementar la hidratación de manos y, sobre todo, emplear un producto higienizante que contenga aloe vera y glicerina y sea de calidad.
¿Cuándo realizar la higiene de manos en el trabajo?
- Al llegar a nuestro centro de trabajo
- Antes y después de comer
- Después de tocar objetos potencialmente contaminantes (puertas, interruptores, ordenador, etc.)
- Tras utilizar el baño
- Al cambiar de actividad o finalizar la jornada de trabajo
Por otra parte, los trabajadores que tienen que tener un especial cuidado en la higiene de manos y en todas las medidas de prevención de contagios son: personal sanitario, trabajadores que manipulan alimentos, personal docente, quienes manipulan agentes químicos y trabajadores de laboratorio, personal de servicios de emergencias, personal de prisiones y servicios sociales, productores agrícolas y pescadores, quienes trabajan con residuos y aguas residuales o cuidadores de animales y/o de cría. Todos ellos deben ser aún más rigurosos que el resto y deben tener un especial cuidado en velar por la salud y seguridad de sus compañeros trabajadores y todos los que les rodean.